Alcanzar una posición
en una organización, un espacio o un lugar en el mundo empresarial, en el
ámbito laboral, genera una tranquilidad, una estabilidad profesional y
personal... es la denominada y peligrosa zona
de confort.
¿Qué es la zona de confort?
Simplemente es el status quo, la situación actual de una empresa, de un proceso funcional de la misma o de una persona dentro de un engranaje organizacional.
Es el área de desenvolvimiento y acción que se conoce y domina para moverse con comodidad.
Lo cual puede ser positivo o… no tan positivo, porque nada en el mundo es estático, todo cambia, todo se mueve para bien o para mal.
La dinámica es la constante de evolución e innovación, pilares del éxito empresarial. El agua bajo un puente pasa solo una vez.
¿Qué hacer? ¿Moverse o quedarse en esta zona de confort?
La estabilidad es importante y es un objetivo que se debe trazar y alcanzar.
Antes de llegar a una zona estable (la actual), la situación era diferente, incluso hasta podía ser caótica… pero, era, o se le puede denominar, una primera zona de confort.
El miedo a lo desconocido es inherente al ser humano
Cambiar genera miedos, internos y externos. Es el temor a dejar de actuar en el campo de acción conocido que resguarda las propias acciones y garantiza la integridad alcanzada.
Lo que se olvida frecuentemente, es que la ahora zona de confort en algún momento fue una área completamente desconocida e inexplorada; y muy probablemente el temor al enfrentarse a ella, en su momento, fue similar al temor por moverse de la zona de confort actual.
Son las dudas y el normal temor por indagar qué hay más allá del terreno firme, de lo conocido.
¿Qué habría pasado si Cristóbal Colón no hubiese salido de la pasiva y conocida zona de confort de los navegantes del siglo XV?
Un mundo desconocido ¿Qué hay más allá?
La primera acción para migrar y crecer a nivel personal, profesional y empresarial es plantear y resolver algunos interrogantes:
1. ¿Qué zona se está ocupando en el presente?
2. ¿Qué zonas se han ocupado en el pasado?
3. ¿Qué zonas se quieren ocupar en el futuro?
Las mayores dificultades y principales retos con un equipo de trabajo se presentan cuando se asumen nuevas metas, cuando es necesario afrontar nuevos desafíos.
En estos momentos, la resistencia al cambio, el temor y la negativa para abandonar la zona de confort, es una inercia que no es fácil de vencer.
Aquí es donde todo líder, con su visión y acción, debe aplicar principios de comunicación asertiva, ajustar el estilo de trabajo a la situación actual (Modelo de las 4 A´s), crear o mejorar la empatía, ofrecer y dar mucha ayuda y colaboración a todos los miembros del equipo en su justa medida y momento.
De la zona de confort a la zona mágica del crecimiento
Partiendo de la zona de confort, se puede optar por la zona de aprendizaje y experimentar la zona de pánico que se convertirá (bien gestionada) en la zona mágica del crecimiento, y lo que realmente sucederá es que se ampliarán las pequeñas y primeras zonas de confort... el crecimiento personal, profesional y empresarial será (garantizado) a nivel exponencial.
¡¡¡Hay que optar por el cambio, hay que adquirir conocimientos que permitan expandir la zona de confort!!!

Comentarios
Publicar un comentario